Domar un caballo no es fácil y menos si su carácter no acompaña. Por eso cada caballo necesita su tiempo. Un caballo manso que esta muy manoseado se puede empezar a montar muy pronto y se le empiezan a ver las cosas enseguida, por el contrario se tardará un mes como mínimo en poder subirte. Un caballo domado en nuestra casa tiene que salir al campo sin complicación, andando por el pueblo sin espantarse de coches, tractores... También estará domado en el picadero, galopando a las dos manos, circulos cerrados, apoyos... y según el tiempo que usted desee darle irá más perfeccionado o menos. Cada caballo tiene unas cualidades que en ocasiones merece la pena que las desarrolle.
Si usted desea domar su potro o potra, no dude en ponerse en contacto con nosotros.
